lunes, 5 de octubre de 2009

Cobarde y reprobable acto al colocar silicona en la Iglesia y campanario

Ayer se produjo un lamentable y cobarde acto al colocar silicona en las cerraduras de la iglesia y el

campanario, con el objeto de impedir el normal funcionamiento y desarrollo en el pueblo,por la tarde

habia entierro.


Si lo que molesta a algún cobarde es el ruido de las campanas, lo que tiene que hacer es ir al

ayuntamiento a presentar una queja, y el Alcalde que para eso esta, pondrá soluciones mediante

ordenanzas, para que sin vulnerar la Ley, se respeten los derechos de los ciudadanos en cuanto

a la ley de calidad medioambiental ,y por otro lado también se respeten los derechos de otros

ciudadanos que quieren seguir disfrutando de los tradicionales volteos de campanas para

comunicarse.


Si también lo que le molesta a este cobarde es que unos ciudadanos ejerzan libremente el

derecho de reunión, quiere decirse que este cobarde lo que tiene es un problema psicológico

grave. Si no esta de acuerdo con la iglesia católica, no pasa nada, con no ir tiene bastante,

pero que deje a los demás ejercer sus derechos libremente.


Ayer por la tarde se celebro un entierro que se podía haber frustrado por culpa de este cobarde

y también que tenga en cuenta que de los 14 entierros que ha habido este año, los 14 han

pasado por la iglesia, y a ninguno se le ha preguntado a quien votaba.


A los que van diciendo que “eso es cosa de los chavales le diría que no me lo creo y es

prácticamente imposible , que en Zarra hayan chavales y niños tan salvajes, que no es una

gamberrada, y que el cobarde que lo ha hecho sabia lo que estaba haciendo.


Ahora le toca al Alcalde, que aunque no tiene culpa, si que debe reprochar y buscar una solución

a un problema que afecta a todos los ciudadanos del pueblo.